Los trabajadores de Española del Zinc, en la defensa de sus puestos de trabajo y desde hace años luchando han tomado la decisión de encerrarse en la Catedral. Son varias las claves a analizar para entender con claridad el porqué de esta situación. Por un lado, la pasividad tanto del Gobierno regional como central; de otro, la actitud de la empresa: cuando parece que un problema está despejado surge otro y así día tras día.
Estos trabajadores, en rebeldía porque no quieren que su empresa desaparezca, cansados de que la alternativa a sus puestos de trabajo esté al alcance de su mano pero no llegue, saben que si no sale el proyecto quedarán sin alternativas reales, viviendo y sufriendo la incertidumbre y la angustia ante su futuro
Una vez más se pone de manifiesto que solo la lucha y el tesón de los trabajadores, junto con la solidaridad de los demás, pueden alcanzar los objetivos que buscamos, que no son otros que mantener sus puestos de trabajo con lo que eso lleva de trabajo indirectos etc.
Es preciso que los que tienen responsabilidades en este tema eleven sus voces, busquen consenso y soluciones serias y con fundamento, sin tardanza porque ya está bien. Mientras, nos queda manifestar solidaridad a los trabajadores de Zinsa.
domingo, 28 de junio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario